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| Fuente texto y foto: cdnumancia.com |
Un gol de Victor en la segunda parte acabó con las aspiraciones del Numancia
Un solitario gol de Victor en los inicios de la segunda mitad dio al traste con las ilusiiones numantinas de conseguir un buen resultado en su visita al Cartagonova. El Numancia lo intentó hasta el final y murió en el campo rival, pero fue incapaz de batir a Casilla. Juan Carlos Unzué optó por repetir el equipo que goleó la semana pasada al Xerez en Los Pajaritos. Los primeros compases resultaron igualados, aunque con el Numancia ofreciendo una clara sensación de peligro. Con Del Pino en la banda y Barkero ayudando a Nagore y Dimas en la creación, el Numancia tiene mayor presencia ofensiva y quiere siempre el balón. Tanto Cedric en banda izquierda como Del Pino en la derecha fueron puñales para la defensa cartagenera y aunque la primera parte acabó sin goles, tanto el madrileño como el congoleño gozaron de ocasiones para batir a Casilla. También el Cartagena es equipo de tener el balón y cuenta con buenos futbolistas que juegan por fuera, pero el equipo soriano tapó bien los espacios y apretó en la presión durante la primera mitad, haciendo inútiles las aproximaciones locales al área de Eduardo, que sólo sufrió en los cuatro saques de esquina que dispuso el equipo blanquinegro. En la segunda mitad, cuando ningún equipo se había hecho todavía con el control del balón, Víctor se inventó un remate inverosímil que acabó en las mallas. Otra vez le tocaba al Numancia remar contracorriente y de nuevo acabó asediando al equipo rival en su área, pero sin acierto de cara al gol. Unzué quitó a Jaio y sacó a Victor Andrés para tener superioridad en el centro del campo, pero ni por esas. Flaño obligó a Casilla a hacer la parada de la tarde cuando finalizaba el partido, e Íñigo Vélez y Del Pino también tuvieron el empate sus botas, pero el balón se negó a entrar, consumando la derrota numantina en Cartagena.
Un solitario gol de Victor en los inicios de la segunda mitad dio al traste con las ilusiiones numantinas de conseguir un buen resultado en su visita al Cartagonova. El Numancia lo intentó hasta el final y murió en el campo rival, pero fue incapaz de batir a Casilla. Juan Carlos Unzué optó por repetir el equipo que goleó la semana pasada al Xerez en Los Pajaritos. Los primeros compases resultaron igualados, aunque con el Numancia ofreciendo una clara sensación de peligro. Con Del Pino en la banda y Barkero ayudando a Nagore y Dimas en la creación, el Numancia tiene mayor presencia ofensiva y quiere siempre el balón. Tanto Cedric en banda izquierda como Del Pino en la derecha fueron puñales para la defensa cartagenera y aunque la primera parte acabó sin goles, tanto el madrileño como el congoleño gozaron de ocasiones para batir a Casilla. También el Cartagena es equipo de tener el balón y cuenta con buenos futbolistas que juegan por fuera, pero el equipo soriano tapó bien los espacios y apretó en la presión durante la primera mitad, haciendo inútiles las aproximaciones locales al área de Eduardo, que sólo sufrió en los cuatro saques de esquina que dispuso el equipo blanquinegro. En la segunda mitad, cuando ningún equipo se había hecho todavía con el control del balón, Víctor se inventó un remate inverosímil que acabó en las mallas. Otra vez le tocaba al Numancia remar contracorriente y de nuevo acabó asediando al equipo rival en su área, pero sin acierto de cara al gol. Unzué quitó a Jaio y sacó a Victor Andrés para tener superioridad en el centro del campo, pero ni por esas. Flaño obligó a Casilla a hacer la parada de la tarde cuando finalizaba el partido, e Íñigo Vélez y Del Pino también tuvieron el empate sus botas, pero el balón se negó a entrar, consumando la derrota numantina en Cartagena.
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